POLÍTICA ECONÓMICA ORIENTADA A LA FELICIDAD

 


El buen funcionamiento de la economía de un país tiene un impacto considerable en la calidad de vida de sus ciudadanos. Además, es la base de diversos aspectos que influyen en el bienestar, como la educación, sanidad, respeto de los derechos y libertades, etc. Los estudios sobre el bienestar subjetivo llegan a la conclusión de que la influencia de la renta per cápita sobre la felicidad es bastante alta hasta que un país alcanza unas condiciones de vida digna. A partir de dicho nivel el impacto es cada vez menor hasta convertirse en relativamente pequeño.

Generalmente la política económica que más bienestar causa es la que se encuentra en una banda central de la moderación, evitando los extremos. Ese equilibro está orientado:

  • Tanto a las empresas como a las personas.
  • Tanto a la protección social como a la generación de riqueza y empleo.
  • Tanto a la inversión como al gasto.
  • Tanto a disfrutar de una calidad de vida presente como a un futuro mejor.

Es bastante obvio que una política económica que genere riqueza y empleo contribuye al bienestar. Lo que no es tan fácil de ver es que la misma requiere una orientación business-friendly, ya que la prosperidad no suele caer del cielo por sí sola, salvo que un país tenga la suerte de contar con abundantes recursos naturales. 

La riqueza es producida por el tejido empresarial, especialmente cuando éste es eficiente, productivo y competitivo. El mismo es la gallina de los huevos de oro, de donde sale casi todo: empleo, riqueza, impuestos, sanidad, educación, ayuda a los necesitados, etc. Aunque parezca paradójico, una de las mejores maneras de ser pro-trabajadores, pro-desempleados, pro-jubilados y pro-personas con discapacidad laboral es ser pro-empresas, ya que generalmente cuanta más riqueza generan éstas más ricos son todos los demás.

Al mismo tiempo, para que esto último sea realidad y la sociedad en general pueda disfrutar de una buena calidad de vida es necesario el gasto social, buscando un punto de equilibrio que haga que la eficiencia económica nutra la protección social y ésta a su vez contribuya a mejorar la primera. Es decir, la generación de riqueza permite un mayor presupuesto social y a su vez éste genera un capital humano cualificado (mediante la educación, sanidad, integración de personas marginadas, etc.) que ayuda a la generación de dinero.

Las pruebas de que una política económica equilibrada es la más efectiva para generar bienestar son :

  • Desde un punto de vista económico, la mayoría de países con mejor rendimiento (como Estados Unidos, Europa, Canadá, Australia o Nueva Zelanda) tienen un modelo económico moderado. En cambio, cuando se aplican políticas extremas en cuanto a impuestos, gasto público, endeudamiento o déficit, ello suele generar disfunciones.
  • Desde un punto de vista del bienestar personal, en las encuestas sobre satisfacción con la vida los países que están en lo más alto del ranking son países europeos, Nueva Zelanda, Australia y Canadá. También figuran entre los primeros puestos en los índices de calidad de vida y de desarrollo humano. Se trata de países capitalistas que cuentan con un estado del bienestar.

Entre ellos, suelen ser los países nórdicos los que acostumbran a ocupar los primeros puestos del podio. Se caracterizan al mismo tiempo por:

  • Tener economías muy liberalizadas (suelen estar entre los primeros puestos de los rankings de libertad económica), orientadas a mercado, competitivas e innovadoras.
  • Contar con un estado del bienestar muy desarrollado, que se pueden permitir gracias a la elevada renta per cápita propiciada por esas economías tan abiertas antes mencionadas. Tienen un presupuesto público grande, pero un nivel bajo de corrupción y malgasto, así como un nivel alto de buena gobernanza y calidad de gobierno, a diferencia de otros países. Cuentan con mucho gasto social, pero la gran mayoría de los nórdicos de origen no se aprovechan del mismo, estando mal visto hacerlo y no trabajar cuando se puede hacerlo.

Por todo ello, ese estado del bienestar tan robusto es difícilmente exportable a otros países con no sean tan ricos y que no tengan su fuerte ética del trabajo, generación de riqueza, honestidad, responsabilidad, buena administración de los recursos o el interés general   

Hay otros índices que arrojan resultados bastante diferentes. En este sentido, las encuestas que preguntan por las emociones positivas en las últimas 24 horas colocan en los puestos superiores del ranking principalmente a países latinoamericanos. No obstante, este dato es poco fiable, dado que dichos países también tienen índices altos cuando se les pregunta por las emociones desagradables. Esos lugares están asimismo en los primeros puestos en el Happy Planet Index, que tiene en cuenta la esperanza de vida, la satisfacción con la vida y la ecología, mientras que los nórdicos están en puestos medios. De nuevo, es un índice muy relativo, sobre todo por lo que se refiere a la ecología: un país puede tener grandes e impolutas selvas totalmente vírgenes y al mismo tiempo haber mucho sufrimiento a causa de una guerra, opresión política, etc., y viceversa.

La contribución del gasto social al bienestar tiene forma de parábola, en que la calidad de vida media de los ciudadanos va aumentando conforme aumenta el gasto en educación, salud, ayudas a personas que no pueden valerse por sí mismas.

5.500+ Parabola Fotografías de stock, fotos e imágenes ...

Sin embargo, a partir de un punto dado (diferente en cada país y época), cuanto más gasto social más disminuye el bienestar, ya que cada vez daña más la economía y con ello otros aspectos que influyen en la felicidad.

De hecho, hay países con políticas económicas más bien de tipo liberal que eran muy atractivos y que por ello recibían millones de inmigrantes europeos para acceder a una vida mejor, como Venezuela o Argentina, en los que la introducción de políticas demasiado intervencionistas han acabo arruinando el país y la calidad de vida, sumiendo a la mayor parte del a población en la pobreza. Y ello ha provocado un éxodo masivo de millones de habitantes a otros países en busca de una vida más decente. Algo parecido ha ocurrido el África, donde políticas muy intervencionistas unidas a la corrupción han condenado a ese continente a la miseria y un bajo nivel de bienestar tanto material como subjetivo.

No obstante, cuando el Estado interviene para promover eficazmente la generación de riqueza ello suelo aportar un aumento el poder adquisitivo y bienestar, como el programa de Israel para promover las start-ups tecnológicas (causante en gran medida de la altísima renta per cápita que tiene este país en la actualidad), los organismos públicos de Suecia para desarrollar la innovación, el sistema fiscal danés que premia la generación de riqueza y empleo y penaliza el gasto y el consumo, las políticas de Evo Morales en Bolivia con las que desarrolló el sector minero o el apoyo de Corea del Sur a sus grandes industrias y de China a su industria tecnológica.

Leer más en «Economía orientada a la felicidad».

¡QUIERO CONSEJOS PARA SER MÁS FELIZ!

Suscríbete a nuestro boletín gratuito y recibe tips prácticos y basados en ciencia para mejorar tu calidad de vida:

– Consejos de expertos en salud y bienestar

– Estrategias simples para reducir el estrés y otros tipos de malestar

– Técnicas para aumentar tu felicidad día a día

🎁 REGALO:

Al suscribirte, recibirás nuestra Guía Gratuita «Cómo ser más Feliz».