¡NO DAÑEMOS!: COMBATAMOS EL NARCISISMO PERVERSO QUE TODOS TENEMOS
Algo que causa muchos daños es el narcisismo perverso propio de la especie humana. Me refiero a la creencia típica que tenemos de que somos los más guays de la creación, superiores a otras especies, razas o pueblos, y que por tanto derecho a usar y abusar de ellos, a explotarlos y maltratarlos. A veces va incluso acompañado de la idea de que podemos hacer con ellos lo que queramos, como los romanos con los “bárbaros” y los blancos con los negros.
Desgraciadamente me crié en una sociedad así, hasta el punto de que en la misma estaba normalizado maltratar y torturar animales no humanos por pura diversión, como en las corridas de toros, lanzar cabras desde el campanario de la iglesia o tirar del cuello de gansos vivos hasta que se rompen. Incluso durante años todo eso a mí también me parecía normal, siendo parte de esa psicopatía colectiva, por mucho que ahora me avergüence y me horrorice al mismo tiempo.
Es curioso que los homos sapiens tengamos un concepto tan bueno de nosotros mismos y nos creamos la última Coca-Cola del desierto. Y también que tengamos un concepto tan bajo del resto de las especies, teniendo en cuenta de que el género humano es el que más crueldades, atrocidades y maldades ha cometido y comete, con mucha diferencia respecto a otras criaturas.
Porque los perros nunca han llevado a cabo genocidios, las vacas nunca han torturado, las gallinas nunca han esclavizado y los conejos nunca han hecho reinos o imperios a base de arrasar aldeas y ciudades, saquear a sus habitantes y violar a sus mujeres.
Algunos pueden pensar que todo eso lo hacen sólo algunos humanos, pero la historia nos dice que son fenómenos generalizados, con gran apoyo social. Y ello es así porque el homo sapiens es por naturaleza bastante bueno, por un lado, pero bastante malvado otro, a pesar de que suele tener una imagen edulcorada de sí mismo, justamente debido a su narcisismo. El mismo hace que estemos pagados de nosotros mismos y encantados de conocernos.
Algunos basan la supuesta superioridad del género humano en la inteligencia. Pero, entonces ¿ello quiere decir que un niño de 2 años es inferior a un cerdo o una gallina? Porque los científicos han descubierto que estos últimos tienen una inteligencia equivalente a niños de 4 años ¿O significa que un superdotado pueda hacer lo que quiera con alguien con una inteligencia media? ¿Y que éste pueda encerrar en jaulas y maltratar a alguien con discapacidad mental?
Justamente los que defienden el supremacismo basado en la inteligencia suelen ser los que menos motivos tienen para enorgullecerse de ésta, ya que normalmente no cuentan con coeficientes intelectuales muy altos. De hecho, está comprobado que los que poseen una inteligencia superior tienden más a ser veganos, respetuosos e igualitarios con otras especies. Los que son más básicos y analfabrutos son más proclives a lo contrario.
Una prueba de nuestra limitada inteligencia es que solemos perpetuar las creencias que hemos aprendido en nuestra infancia sin cuestionárnoslas, ya que la mayoría de humanos no cuenta con las capacidades intelectuales básicas para hacerlo por sí solos. Por ello suelen ser supersticiosos y creerse de pies juntitas 1 de las 4.240 religiones que hay en la actualidad (o, en el pasado, 1 de las decenas de miles que existieron): la que le han inculcado. Normalmente tienen una fe ciega en la misma, como si tratase de una verdad absoluta, a pesar de no haber hecho la más mínima labor de comprobación de su veracidad.
Alguno replicará que hemos sido capaces de crear cohetes con los que llegar a la luna o puentes como el de San Francisco. Pero, una vez más, ello es sobrevalorarse de forma engreída, ya que ni yo he hecho tal cosa ni casi nadie. Sólo una minoría son los que pueden inventar dicho tipo de cosas.
Esa actitud narcisista perversa es nefasta, ya que causa muchísimos sufrimientos a los demás. Además, esa autocomplacencia conlleva creer que no necesitamos mejorar porque ya somos fantásticos, por lo que en realidad nos hace mediocres. Y, lo que es peor, todo ello está muy extendido.