¡NO DAÑEMOS!: No seamos racistas, etnicistas, xenófobos, ultranacionalistas.

El racismo, etnicismo, xenofobia y ultranacionalismo son diferentes partes de un mismo cuerpo que a lo largo de la historia han causado sufrimientos enormes y a gran escala.

Leer ¡NO DAÑEMOS!: Concienciemos de los sufrimientos causados por el racismo, etnicismo y ultranacionalismo

Dichos grupalismos suelen ser de alguno de estos tipos:

  • Nacional: mi grupo son los que han nacido dentro de las fronteras de mi estado-nación, como el estadounidense, francés o español.
  • Etno-lingüistico: mi grupo son los que hablan mi lengua, como el nacionalismo alemán hasta la Segunda Guerra Mundial o el ruso, catalán o de bastantes etnias africanas de hoy en día.
  • Etno-religioso: mi grupo son los que tienen mi misma religión, como los nacionalistas judíos o hindús.
  • Etno-lingüístico-religioso, como el serbio, croata, bosníaco o de Irlanda del Norte.
  • Racial, como sucede con los supremacistas blancos.
  • Tribal: mi grupo es mi tribu, como en Papúa-Nueva Guinea o las selvas del Amazonas.

Lo que cambian son los criterios de definición de la comunidad con la que nos identificamos, pero la esencia es la misma. En realidad, son todos son las mismas casas pareadas, pero pintadas en diferentes colores. Incluso los ultranacionalistas de dos grupos que se odien a muerte son muy parecidos entre sí en sus actitudes tribales.

Todos los clanismos dañinos forman parte de la gran familia del gregarismo nocivo, que incluye también el especismo supremacista y los sentimientos exacerbados de pertenencia a religiones o ideologíasY también está relacionado con el rebañismo tóxico  y el imperialismo.

¡NO DAÑEMOS!: No seamos especistas sin escrúpulos 

¡NO DAÑEMOS!: No sigamos al rebaño para dañar

¡NO DAÑEMOS!: Opongámonos al imperialismo, militarismo y culto a la violencia

La causa del tribalismo es que nacemos con este mecanismo biológico debido a la selección genética que ha tenido lugar durante miles de años o incluso cientos de miles de años …leer más.

Un sentimiento de identidad de nivel bajo o medio-bajo suele ser inocuo o incluso beneficioso, pero cuando es de intensidad media-alta puede convertirse en la antesala del grupalismo exacerbado y dañino. Puede permanecer latentemente de una manera tranquila e inofensiva hasta que estalla un conflicto y dicho sentimiento se desboca en mucha gente (ya que es así como funciona ese instinto natural) y puede desembocar en daños a inocentes e incluso en atrocidades.

Porque los conflictos de tipo nacionalista y gregario son como una caja de pandora, que cuando se abre se sabe cómo empiezan pero no como terminan. Por eso, conviene no bajar nunca la guardia con esta amenaza siempre subyacente. Tomemos ejemplo de Alemania, que aprendió bien la lección tras el desastre del nazismo. Y reaccionó exitosamente para combatir el nacionalismo de las siguientes maneras:

1. Educación, que pone un fuerte énfasis en la enseñanza sobre el Holocausto y los crímenes del nazismo.

2. Memoria histórica, mediante museos y monumentos.

¡REPAREMOS LOS DAÑOS!: También los históricos

3. Prohibición del nazismo y los discursos del odio. 

¡NO DAÑEMOS!: No seamos antisemitas

¡NO DAÑEMOS!: Combatamos las agresiones injustas contra judíos

4. Cooperación con otros países.

Incluso pueden estar mal vistos el nacionalismo y las exhibiciones de patriotismo, como agitar banderas nacionales.

Como el tribalismo es un mecanismo biológico que forma parte de nuestro ADN, no tenemos la culpa de nacer con él, pero sí somos responsables de canalizarlo de manera positiva, de las siguientes maneras:

1. Pasar de un ultranacionalismo en ocasiones conflictivo, fanático e impositivo a un civismo sano, respetuoso, abierto y equilibrado que se interesa (o incluso está altamente comprometido) por la comunidad de la que formamos parte y es cosmopolita al mismo tiempo. Evolucionar desde un tribalismo seguidor y en ocasiones lleno de odio hacia inocentes a una actitud constructiva que contribuye al buen funcionamiento del lugar donde vivimos y simultáneamente desea el bien de todo el mundo.

2. Evitar el gregarismo dañino. Leer más… 

3. Deshacer los adoctrinamientos identitarios que hayamos recibido. Leer más…  

4. Cuestionar las narrativas nacionalistas. Leer más…

5. Pensar por nosotros mismos. Leer más… 

6. Viajar y, sobre todo, vivir alguna temporada en el extranjero. Y fomentar que nuestros hijos también lo hagan. Tomemos ejemplo en este sentido de los islandeses, suizos, noruegos, holandeses, suecos, daneses y finlandeses.

7. Tener amigos de otras nacionalidades, etnias y razas.

8. Interesarse por otras culturas y aprender de ellas lo que tengan de positivo (aunque no lo negativo). Imitemos la curiosidad por otras culturas de los holandeses, suecos o alemanes.

¡CONSTRUYAMOS UN MUNDO MEJOR!: Orientémonos a la excelencia para conseguirlo

9. Intentar ser abiertos y anchos de miras. Leer más…

10. Fomentar identidades más amplias, inclusivas y universales, abarcando otros grupos humanos, especies y la naturaleza, dejando solamente fuera a aquellos cuyo nivel de abusividad sea excesivo.

11. No inculcar a los niños relatos identitarios, sino educarlos en valores benignos como el respeto, diversidad, tolerancia, justicia, libertad, la apertura de mente y en general la ética de la bondad. Leer más…

Todos los anteriores son los ingredientes del antídoto contra el veneno ultragregario. Ahora bien, es necesario usar las dosis adecuadas, porque si pones de más puedes acabar cayendo en el abuso de dar privilegios a razas/etnias desfavorecidas o en otros tipos de “wokismos” extremistas.

¡NO DAÑEMOS!: Demos los mismos derechos y ningún privilegio a todas las razas/etnias

¡NO DAÑEMOS!: No caigamos en un woke extremista

Por otro lado, no es xenofobia:

  • Abrirse a la inmigración inocua, pero cerrarse a la dañina. Leer más…
  • Conservar la parte positiva del propio acerbo cultural, así como rechazar la negativa de otras culturas. 

¡NO DAÑEMOS!: Seamos conservadores con lo bueno y progresistas con lo dañino

¡SEAMOS MÁS CIUDADANOS DEL MUNDO Y TENGAMOS UN ESPÍRITU MÁS UNIVERSAL!

Para evitar el gregarismo tóxico en el mundo también puedes firmar estas campañas para pedir a todos los gobiernos que:

1. Amparen y concedan plena igualdad de derechos a los colectivos étnicos, raciales, nacionales u otros oprimidos y discriminados. Firmar….

2. Reconozcan el derecho de niños y adolescentes a no recibir adoctrinamientos dañinos. Firmar…

3. Eviten los discursos del odio y rechazo a inocentes. Firmar…

Y asimismo es conveniente compartir y convencer a los demás. Leer más...

Si crees que estos consejos pueden contribuir a evitar que se repitan horrores y atropellos del pasado y del presente, te animo a que hagas algo al respecto.

Gracias,

 Xavier Paya 

Iniciativa ¡NO DAÑES!

www.institutodelbienestar.com

NO HAGAMOS DAÑO A NADIE, salvo legítima defensa contra el agresor.

 

Lee: Cuestionémosnos las narrativas identitarias

Lee: otros artículos de ¡NO DAÑES!…

Con la iniciativa ¡NO DAÑES! luchamos por evitar que te causen cualquier tipo de sufrimiento o daño a ti, tus seres queridos y los demás.

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